'México necesita invertir 923,000 mdd en infraestructura para 2025'
México necesitaría invertir 923,000 millones de dólares (mdd) en infraestructura para atender el crecimiento económico esperado en 2025, considerando que su Producto Interno Bruto (PIB) se mantenga a un ritmo de 3.5% por año, informó la consultora McKinsey & Company.
De acuerdo con el reporte "A tale of two Mexicos: Growth and prosperity in a two-tier economy", el país tiene una brecha existente de 193,000 mdd entre el valor actual de la infraestructura y de lo que debería ser una infraestructura "adecuada" para mantener su porcentaje de PIB actual.
El reporte destaca que en otras economías han encontrado que el valor de la infraestructura en la Bolsa de Valores de un país es de 71%, mientras que en México representa sólo 53%.
La mayor parte de esta diferencia de 18 puntos, según McKinsey & Company, se debe a una falta de proyectos de agua y transportación. Por ejemplo, la densidad de carreteras es de sólo 0.11 km/km2 comparado con los 0.40 km en China o de los 0.67 km en los Estados Unidos.
La eficiente distribución del agua representa un reto adicional, ya que durante los próximos 20 años aumentará la población de 30,000 a 40,000 millones que necesitaran acceso a agua potable.
Actualmente existe una deficit importante en el suministro de agua; al día de hoy la brecha es de 15,000 hectómetros (hm3) aunque se espera aumentar la capacidad a 23,000 hm3 para 2030.
El gobierno federal ya se ha comprometido en invertir para este sector a través de su Programa de inversiones en infraestructura de Transportes y Comunicaciones 2013-2018, que anunció el presidente Enrique Peña Nieto el pasado 13 de julio de 2013.
McKinsey & Company estima que esta estrategia nacional implicaría un gasto total de 658,000 mdp para 2025, lo que haría que México creciera 5%, y pasar a 58%, lo que reduciría la brecha global promedio de 12% del PIB.
Lo anterior supone que el país debería de estar invirtiendo cerca de 71,000 mdd anuales durante los próximos 11 años en este sector, y que podría ayudar a atender su rápida expansión económica, el crecimiento de su población y las necesidades de la clase media.
Además de ayudar al país a alcanzar tres metas estratégicas:
- Servir a la creciente clase consumidora. El crecimiento de la clase media en México tendrá un impacto significativo en las necesidades de infraestructura. Esto incluye una mayor demanda en la infraestructura de transporte para la entrega de bienes y servicios.
- Crear un crecimiento inclusivo. Inversiones en carreteras, tránsito y en sistemas de agua puede garantizar la oportunidad de beneficiar a todos los mexicanos, derivado de su crecimiento económico. Un paso importante es mejorar la conectividad de las regiones subdesarrolladas.
- Mejorar la habilidad para servir a mercados globales. Incrementar los costos laborales en Asia y decrementar los costos en energía en Estados Unidos permitirá que México compita en los negocios globales. Para poder tomar una completa ventaja en estas tendencias, es importante tener una buena y rápida infraestructura de transporte mientras se mantengan los costos lo más bajo posible.
